Por Alberto Barrios
Con sus pompas al aire, el turismo nudista llegó al Caribe mexicano para quedarse, entre la indiferencia, el desconcierto y la ignorancia de las autoridades y la murmuración morbosa de críticos que enarbolan indignados el ataque a la “moral y las buenas costumbres”.
Lo mismo en Isla Mujeres, con el apoyo municipal, que en Puerto Morelos, la Riviera Maya o en Xcalak, en la frontera marítimo terrestre con Belice, entre el morbo habitual del mexicano promedio y la estricta capacitación de los empleados de los hoteles que ofrecen esta alternativa turística, miles de visitantes estadounidenses, europeos y mexicanos arriban para disfrutar las playas, los restaurantes y las discotecas literalmente encuerados.
Y todo indica que el turismo nudista se incrementará a la par que el tradicional. El anuncio la semana pasada de la Secretaria de Turismo, Gloria Guevara Manzo de inversiones por más de 200 millones de pesos en el marco de la Expo “AMDETUR fortaleció la ola de optimismo que se ha generado en los últimos meses con la paulatina recuperación del destino que igualmente se especializa en turismo de salud,congresos y convenciones que en el turismo naturista, en el cual se encuadra el nudismo.
El concepto del turismo nudista se ha incrementado en los últimos años en el Caribe Mexicano. Para la historia quedó registrado en el año 2003 la llegada de un vuelo de avión desde Miami, bautizado como "Naked air", con 86 pasajeros la mayoría adultos en pareja, con edades promedio de 50 años, que en el lapso que duró el viaje entre Miami y Cancún se despojaron de sus ropas como parte de su peculiar forma de disfrutar. Una decena de mexicanos venían también en ese viaje.
En México son Zipolite y Zicatela, en Oaxaca, las dos playas nudistas más famosas, frecuentadas desde los sesentas por grupos de hippies que enarbolaban como forma de vida la revolución sexual, el amor libre y el consumo de marihuana y hongos alucinógenos.
Desde entonces, el turismo nudista es una realidad en diversas playas del país, desde Oaxaca hasta Baja California Sur, pasando por Guerrero, Jalisco y, desde hace algunos años, en Quintana Roo. Ya no son hippies, sino profesionistas, empresarios y ejecutivos de alto poder adquisitivo, quienes disfrutan esta alternativa recreativa. No hay cifras oficiales, pero se estima que a Quintana Roo el turismo nudista le deja una derrama económica superior a los 30 millones de dólares, de acuerdo a las cifras de la Asociación Americana de Recreación Nudista, un ente en el cual están agrupados diversas organismos que fomentan esta práctica que en EU sí está regulada. El gasto promedio de estos turistas se sitúa entre dos y seis mil dólares, muy superior al del turista promedio. Las agencias de viajes Castaways Travels y Sunmex son las que más trabajan este concepto.
Aunque en su mayoría lo practica estadounidenses, canadienses y europeos, gente adulta de amplio criterio, durante los últimos años se han sumado parejas o solteros mexicanos más interesados en la búsqueda de experiencias sexuales.
En el Caribe Mexicano son varios los centros recreativos, todo incluido, que operan esta alternativa, con altas ocupaciones, en un marco legal impreciso ya que al ser las playas zonas públicas se presta para violaciones a los bandos de policía y buen gobierno: el grupo Original Resorts maneja bajo esa modalidad el Tempation, en la zona hotelera y el Desire, en Puerto Morelos, dos de sus cuatro hoteles; el Hidden Beach Resort, con 80 habitaciones, de la cadena Karisma Hotels, con tarifas de 500 dólares la noche, localizado en Kantenah en la Riviera Maya, se promociona abiertamente como un hotel nudista en el Caribe mexicano, con un ambiente completamente desinhibido donde los clientes participan en una amplia gama de actividades en el desnudo, desde tomar el sol a cenar y bailar; playa Naturel está situado en Tan-Kah, Tulum, en donde uno puede optar por el nudismo o no. El alojamiento es en edificios de estilo rústico con palapa con techo de paja y espectaculares vistas al océano, sin teléfonos o televisión. Más hacia la frontera con Belice, en las costas de Xcalak, un discreto y pequeño hotel llamado Sonrisas, también ofrece este servicio, bajo el lema “Todo lo que necesitas es tu sonrisa.” Otro lugar que se promociona más discretamente es la Reserva Naturista Mayaztec, un rancho cerca de Playa del Carmen. Asimismo, en internet, en los círculos nudistas se recomiendan las Cabañas Copal -43 cabañas rústicas del grupo EcoTulum Resorts & Spa-, Azulik en Tulum y Punta serena Villas & Spa. En todos los casos se hace énfasis en el respeto y la seriedad de la convivencia entre los visitantes.
De hecho, sin excepción, todos los empleados de los hoteles son capacitados para ser muy cuidadosos en su trato con los visitantes, de forma que se abstengan de mirarlos fijamente o de hacerles preguntas relativas a sus gustos nudistas.
“Al principio es un poco difícil”, acepta Emeterio Canché, un joven mesero del Desire, en Puerto Morelos, “pero te acostumbras, porque todos ellos se comportan naturalmente, sin morbos o penas; se ve que están acostumbrados”.
Sin embargo, las prácticas nudistas provocan reacciones. Argumentan los opositores como Francisco Mendoza Reyna, delegado municipal en Puerto Morelos que, “atentan contra la moral y las buenas costumbres” de las familias que transitan por las playas.
Emeterio Canché se ríe ante el argumento: “los que no tienen educación son esos que se oponen, porque quienes practican el nudismo aquí en el hotel en su mayoría son gente seria, formal, adultos respetuosos de la naturaleza, que acostumbran separar su basura y que les gusta saber que en el hotel se ahorra agua y energía como parte de una cultura de respeto al ambiente. En cambio, debería de ver cómo hay morbosos, mexicanos, que se pasean en lanchas frente a las playas del hotel para ver a los turistas desnudos. Realmente no entiendo qué les ven, si todos tenemos lo mismo.”
Contrario a la posición del delegado municipal de Puerto Morelos, en el municipio de Isla Mujeres oficialmente se comunicó que se trabaja con una agencia de viajes llamada Naked Boat Parties Uncensored (Fiestas nudistas en yates sin Censura), a fin de atraer turistas que practican el nudismo. Viviana Chan Ihuit, quien fuera funcionaria municipal de Turismo, aclaró que la empresa se especializa en turistas de alto poder adquisitivo -de entre 30 y 50 años de edad-, de los estados de Jalisco, Nuevo León, Coahuila, Ciudad de México, Estado de México y Veracruz, Desafortunadamente, si se busca una agencia con ese nombre en internet todas las referencias conducen a sexo explícito, nada que ver con turismo nudista.
Es esta delgada línea que separa al turismo nudista con la prostitución, el intercambio de parejas y la búsqueda de experiencias sexuales lo que provoca el rechazo y la confusión entre sus opositores.
El turismo nudista genera anualmente 13 mdd. Lo practican mayoritariamente turistas de EU, Canadá y Europa, pero en los últimos años se han sumado mexicanos de los Estados Nuevo León, Jalisco y Tabasco. En EU lo practican familias completas. Se estima entre 15 y 20 millones de personas.
Con sus pompas al aire, el turismo nudista llegó al Caribe mexicano para quedarse, entre la indiferencia, el desconcierto y la ignorancia de las autoridades y la murmuración morbosa de críticos que enarbolan indignados el ataque a la “moral y las buenas costumbres”.
Lo mismo en Isla Mujeres, con el apoyo municipal, que en Puerto Morelos, la Riviera Maya o en Xcalak, en la frontera marítimo terrestre con Belice, entre el morbo habitual del mexicano promedio y la estricta capacitación de los empleados de los hoteles que ofrecen esta alternativa turística, miles de visitantes estadounidenses, europeos y mexicanos arriban para disfrutar las playas, los restaurantes y las discotecas literalmente encuerados.
Y todo indica que el turismo nudista se incrementará a la par que el tradicional. El anuncio la semana pasada de la Secretaria de Turismo, Gloria Guevara Manzo de inversiones por más de 200 millones de pesos en el marco de la Expo “AMDETUR fortaleció la ola de optimismo que se ha generado en los últimos meses con la paulatina recuperación del destino que igualmente se especializa en turismo de salud,congresos y convenciones que en el turismo naturista, en el cual se encuadra el nudismo.
El concepto del turismo nudista se ha incrementado en los últimos años en el Caribe Mexicano. Para la historia quedó registrado en el año 2003 la llegada de un vuelo de avión desde Miami, bautizado como "Naked air", con 86 pasajeros la mayoría adultos en pareja, con edades promedio de 50 años, que en el lapso que duró el viaje entre Miami y Cancún se despojaron de sus ropas como parte de su peculiar forma de disfrutar. Una decena de mexicanos venían también en ese viaje.
En México son Zipolite y Zicatela, en Oaxaca, las dos playas nudistas más famosas, frecuentadas desde los sesentas por grupos de hippies que enarbolaban como forma de vida la revolución sexual, el amor libre y el consumo de marihuana y hongos alucinógenos.
Desde entonces, el turismo nudista es una realidad en diversas playas del país, desde Oaxaca hasta Baja California Sur, pasando por Guerrero, Jalisco y, desde hace algunos años, en Quintana Roo. Ya no son hippies, sino profesionistas, empresarios y ejecutivos de alto poder adquisitivo, quienes disfrutan esta alternativa recreativa. No hay cifras oficiales, pero se estima que a Quintana Roo el turismo nudista le deja una derrama económica superior a los 30 millones de dólares, de acuerdo a las cifras de la Asociación Americana de Recreación Nudista, un ente en el cual están agrupados diversas organismos que fomentan esta práctica que en EU sí está regulada. El gasto promedio de estos turistas se sitúa entre dos y seis mil dólares, muy superior al del turista promedio. Las agencias de viajes Castaways Travels y Sunmex son las que más trabajan este concepto.
Aunque en su mayoría lo practica estadounidenses, canadienses y europeos, gente adulta de amplio criterio, durante los últimos años se han sumado parejas o solteros mexicanos más interesados en la búsqueda de experiencias sexuales.
En el Caribe Mexicano son varios los centros recreativos, todo incluido, que operan esta alternativa, con altas ocupaciones, en un marco legal impreciso ya que al ser las playas zonas públicas se presta para violaciones a los bandos de policía y buen gobierno: el grupo Original Resorts maneja bajo esa modalidad el Tempation, en la zona hotelera y el Desire, en Puerto Morelos, dos de sus cuatro hoteles; el Hidden Beach Resort, con 80 habitaciones, de la cadena Karisma Hotels, con tarifas de 500 dólares la noche, localizado en Kantenah en la Riviera Maya, se promociona abiertamente como un hotel nudista en el Caribe mexicano, con un ambiente completamente desinhibido donde los clientes participan en una amplia gama de actividades en el desnudo, desde tomar el sol a cenar y bailar; playa Naturel está situado en Tan-Kah, Tulum, en donde uno puede optar por el nudismo o no. El alojamiento es en edificios de estilo rústico con palapa con techo de paja y espectaculares vistas al océano, sin teléfonos o televisión. Más hacia la frontera con Belice, en las costas de Xcalak, un discreto y pequeño hotel llamado Sonrisas, también ofrece este servicio, bajo el lema “Todo lo que necesitas es tu sonrisa.” Otro lugar que se promociona más discretamente es la Reserva Naturista Mayaztec, un rancho cerca de Playa del Carmen. Asimismo, en internet, en los círculos nudistas se recomiendan las Cabañas Copal -43 cabañas rústicas del grupo EcoTulum Resorts & Spa-, Azulik en Tulum y Punta serena Villas & Spa. En todos los casos se hace énfasis en el respeto y la seriedad de la convivencia entre los visitantes.
De hecho, sin excepción, todos los empleados de los hoteles son capacitados para ser muy cuidadosos en su trato con los visitantes, de forma que se abstengan de mirarlos fijamente o de hacerles preguntas relativas a sus gustos nudistas.
“Al principio es un poco difícil”, acepta Emeterio Canché, un joven mesero del Desire, en Puerto Morelos, “pero te acostumbras, porque todos ellos se comportan naturalmente, sin morbos o penas; se ve que están acostumbrados”.
Sin embargo, las prácticas nudistas provocan reacciones. Argumentan los opositores como Francisco Mendoza Reyna, delegado municipal en Puerto Morelos que, “atentan contra la moral y las buenas costumbres” de las familias que transitan por las playas.
Emeterio Canché se ríe ante el argumento: “los que no tienen educación son esos que se oponen, porque quienes practican el nudismo aquí en el hotel en su mayoría son gente seria, formal, adultos respetuosos de la naturaleza, que acostumbran separar su basura y que les gusta saber que en el hotel se ahorra agua y energía como parte de una cultura de respeto al ambiente. En cambio, debería de ver cómo hay morbosos, mexicanos, que se pasean en lanchas frente a las playas del hotel para ver a los turistas desnudos. Realmente no entiendo qué les ven, si todos tenemos lo mismo.”
Contrario a la posición del delegado municipal de Puerto Morelos, en el municipio de Isla Mujeres oficialmente se comunicó que se trabaja con una agencia de viajes llamada Naked Boat Parties Uncensored (Fiestas nudistas en yates sin Censura), a fin de atraer turistas que practican el nudismo. Viviana Chan Ihuit, quien fuera funcionaria municipal de Turismo, aclaró que la empresa se especializa en turistas de alto poder adquisitivo -de entre 30 y 50 años de edad-, de los estados de Jalisco, Nuevo León, Coahuila, Ciudad de México, Estado de México y Veracruz, Desafortunadamente, si se busca una agencia con ese nombre en internet todas las referencias conducen a sexo explícito, nada que ver con turismo nudista.
Es esta delgada línea que separa al turismo nudista con la prostitución, el intercambio de parejas y la búsqueda de experiencias sexuales lo que provoca el rechazo y la confusión entre sus opositores.
El turismo nudista genera anualmente 13 mdd. Lo practican mayoritariamente turistas de EU, Canadá y Europa, pero en los últimos años se han sumado mexicanos de los Estados Nuevo León, Jalisco y Tabasco. En EU lo practican familias completas. Se estima entre 15 y 20 millones de personas.
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