Playa del Carmen
5 de julio
Por Silvia Reyes
La jornada electoral de este domingo se tornó violenta luego de que tres sujetos fueron sorprendidos cuando estaban repartiendo dinero y despensas a cambio del votos. Estos arremetieron contra periodistas, a quienes agredieron física y verbalmente, les robaron su equipo fotográfico y amenazaron con dañarlos en su integridad personal.
Enfurecidos porque fueron descubiertos, los sujetos activistas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), golpearon a los periodistas Carlos Narváez, corresponsal del diario local “El Periódico” y Silvia Reyes, coordinadora del Diario de Quintana Roo en la Riviera Maya, a quienes además les robaron sus cámaras fotográficas, equipo que guardaba la evidencia de los delitos electorales.
El proceso electoral para elegir al diputado federal por el Distrito Electoral 01, transcurría en calma, las autoridades reportaban una regular afluencia de votantes a las urnas, que como de costumbre abrieron tarde y algunos funcionarios de casillas no llegaron; nada irrelevantes según el presidente del Consejo Distrital 01, José Luis Olivares Carmona.
Todo apuntaba a que en el municipio de Solidaridad, que pertenece al Distrito Electoral 01, se desarrollarían unas elecciones tranquilas, como bien había señalado el presidente municipal Román Quian Alcocer, quien confió en que se registraría una buena participación de la ciudadanía durante estas elecciones.
Momentos después de emitir su voto, dijo que estaba garantizada la seguridad con más de 700 elementos policíacos. Ante la pregunta de que si trabajadores del gobierno municipal pueden participar como habilitadores de casillas, Quian Alcocer aclaró que “a partir de sábado y domingo son libres de hacer lo que deseen. Sin embargo, no se descarta que estén participando por la misma invitación del Instituto (Federal Electoral) como cualquier ciudadano puede hacerlo”.
Sin embargo, la jornada electoral en Playa del Carmen se vio empañada por los atentados que sufrieron el resto de los periodistas locales, quienes acudieron también al apoyo y solidaridad con los reporteros que momentos antes habían sido ultrajados.
Corresponsales, fotógrafos y reporteros fueron recibidos en el domicilio de la funcionaria de Atención Ciudadana a pedradas, uno de ellos -Margarito Ovando del Diario de Quintana Roo y del Sistema Quintanarroense de Comunicación Social (SQCS)-, incluso recibió un machetazo en su videocámara.
Los tres sujetos, comandados por Juan Carlos Serrano Pinzón, esposo de Ursula Cauich, funcionaria del gobierno municipal se agazaparon en la casa de la ex funcionaria, ubicada en la calle 3ra Sur entre 100 y 105 de la colonia Ejidal, desde donde incluso agredieron a las autoridades del Ministerio Público del Fuero Común y de la Policía Judicial, quienes acudieron a constatar los hechos.
El agente del Ministerio Público, Jorge Dávila de la Procuraduría de Justicia del Estado, así como elementos de la Policía del Estado, quiénes iniciaron el levantamiento, y dieron fe de que al interior de la casa se encontraban 50 personas encerradas, entre ellas, líderes de colonias circunvecinas.
La policía procedió a detener a algunos atrincherados, pero ellos argumentaban que estaban ahí, porque eran invitados de una fiesta. Sin embargo vecinos del lugar, denunciaron que la actividad se llevaba a cabo desde la noche anterior, “hubieran venido desde anoche, estaban organizando las despensas, para todos los que votaran por su partido”.
A preguntas de los reporteros que estaba pasando, fueron amenazados y se refirieron a ellos con palabra altisonantes. Cabe señalar que en la elección local, cuando se eligió al presidente municipal, esta misma vivienda sirvió como centro de operación de los simpatizantes del PRI, hasta donde llegaban ciudadanos a bordo de taxis a celebrar, según dijeron en su momento una fiesta de cumpleaños.
El periodista Carlos Narváez terminó con un dedo fracturado y diversos golpes en el cuerpo, según se hizo constar en la averiguación previa AP/ZN/PYA/01/1712/7-2009, del Ministerio Público del Fuero Común, por los delitos de amenazas, robo, lesiones dolosas y tentativa de homicidio. El caso fue turnado a la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales.
Los periodistas ahora temen por sus vidas, porque los agresores antes de huir, los amenazaron “ya sabemos quienes son y donde andan”.
5 de julio
Por Silvia Reyes
La jornada electoral de este domingo se tornó violenta luego de que tres sujetos fueron sorprendidos cuando estaban repartiendo dinero y despensas a cambio del votos. Estos arremetieron contra periodistas, a quienes agredieron física y verbalmente, les robaron su equipo fotográfico y amenazaron con dañarlos en su integridad personal.
Enfurecidos porque fueron descubiertos, los sujetos activistas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), golpearon a los periodistas Carlos Narváez, corresponsal del diario local “El Periódico” y Silvia Reyes, coordinadora del Diario de Quintana Roo en la Riviera Maya, a quienes además les robaron sus cámaras fotográficas, equipo que guardaba la evidencia de los delitos electorales.
El proceso electoral para elegir al diputado federal por el Distrito Electoral 01, transcurría en calma, las autoridades reportaban una regular afluencia de votantes a las urnas, que como de costumbre abrieron tarde y algunos funcionarios de casillas no llegaron; nada irrelevantes según el presidente del Consejo Distrital 01, José Luis Olivares Carmona.
Todo apuntaba a que en el municipio de Solidaridad, que pertenece al Distrito Electoral 01, se desarrollarían unas elecciones tranquilas, como bien había señalado el presidente municipal Román Quian Alcocer, quien confió en que se registraría una buena participación de la ciudadanía durante estas elecciones.
Momentos después de emitir su voto, dijo que estaba garantizada la seguridad con más de 700 elementos policíacos. Ante la pregunta de que si trabajadores del gobierno municipal pueden participar como habilitadores de casillas, Quian Alcocer aclaró que “a partir de sábado y domingo son libres de hacer lo que deseen. Sin embargo, no se descarta que estén participando por la misma invitación del Instituto (Federal Electoral) como cualquier ciudadano puede hacerlo”.
Sin embargo, la jornada electoral en Playa del Carmen se vio empañada por los atentados que sufrieron el resto de los periodistas locales, quienes acudieron también al apoyo y solidaridad con los reporteros que momentos antes habían sido ultrajados.
Corresponsales, fotógrafos y reporteros fueron recibidos en el domicilio de la funcionaria de Atención Ciudadana a pedradas, uno de ellos -Margarito Ovando del Diario de Quintana Roo y del Sistema Quintanarroense de Comunicación Social (SQCS)-, incluso recibió un machetazo en su videocámara.
Los tres sujetos, comandados por Juan Carlos Serrano Pinzón, esposo de Ursula Cauich, funcionaria del gobierno municipal se agazaparon en la casa de la ex funcionaria, ubicada en la calle 3ra Sur entre 100 y 105 de la colonia Ejidal, desde donde incluso agredieron a las autoridades del Ministerio Público del Fuero Común y de la Policía Judicial, quienes acudieron a constatar los hechos.
El agente del Ministerio Público, Jorge Dávila de la Procuraduría de Justicia del Estado, así como elementos de la Policía del Estado, quiénes iniciaron el levantamiento, y dieron fe de que al interior de la casa se encontraban 50 personas encerradas, entre ellas, líderes de colonias circunvecinas.
La policía procedió a detener a algunos atrincherados, pero ellos argumentaban que estaban ahí, porque eran invitados de una fiesta. Sin embargo vecinos del lugar, denunciaron que la actividad se llevaba a cabo desde la noche anterior, “hubieran venido desde anoche, estaban organizando las despensas, para todos los que votaran por su partido”.
A preguntas de los reporteros que estaba pasando, fueron amenazados y se refirieron a ellos con palabra altisonantes. Cabe señalar que en la elección local, cuando se eligió al presidente municipal, esta misma vivienda sirvió como centro de operación de los simpatizantes del PRI, hasta donde llegaban ciudadanos a bordo de taxis a celebrar, según dijeron en su momento una fiesta de cumpleaños.
El periodista Carlos Narváez terminó con un dedo fracturado y diversos golpes en el cuerpo, según se hizo constar en la averiguación previa AP/ZN/PYA/01/1712/7-2009, del Ministerio Público del Fuero Común, por los delitos de amenazas, robo, lesiones dolosas y tentativa de homicidio. El caso fue turnado a la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales.
Los periodistas ahora temen por sus vidas, porque los agresores antes de huir, los amenazaron “ya sabemos quienes son y donde andan”.
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