Cancún.- Sumido desde hace años en una espiral de violencia incontrolada, provocada por mafias dedicadas al tráfico de drogas y de emigrantes cubanos y centroamericanos, que a su vez son protegidas por el poder político, esta ciudad se ha transformado de un sofisticado centro turístico, a un desordenado centro urbano con una población bipolar, con uno de los más altos índices de suicidios del país y desintegración familiar.
Francisco Alor Quezada, Presidente Municipal de este Municipio, declara que "la ciudadanía no tiene inconveniente de que se maten los delincuentes (SIC de SIC), pero que no sea aquí en Cancún".
Durante las últimas semanas se han cometido diversos asesinatos sin que ninguno haya sido resuelto. Los más evidentes en cuanto a la complicidad del poder han sido las ejecuciones en el corazón de la zona hotelera, que solamente cuenta con 2 salidas viales y que, supuestamente, cuenta con varias cámaras de videograbación. En el último de los asesinatos, el cubano Maximiliano Reyna Molas, fue acribillado en el desprestigiado mercado Coral Negro, frente al Centro de Convenciones. Ninguno de los asesinos fue atrapado.
Hace 2 días, otro cubano, Juan Carlos Reyna Molas, hermano del asesinado en la zona hotelera, también fue emboscado y tiroteado, quedando con muerte cerebral. El poder de los sicarios es evidente.
Francisco Alor Quezada, Presidente Municipal de este Municipio, declara que "la ciudadanía no tiene inconveniente de que se maten los delincuentes (SIC de SIC), pero que no sea aquí en Cancún".
Durante las últimas semanas se han cometido diversos asesinatos sin que ninguno haya sido resuelto. Los más evidentes en cuanto a la complicidad del poder han sido las ejecuciones en el corazón de la zona hotelera, que solamente cuenta con 2 salidas viales y que, supuestamente, cuenta con varias cámaras de videograbación. En el último de los asesinatos, el cubano Maximiliano Reyna Molas, fue acribillado en el desprestigiado mercado Coral Negro, frente al Centro de Convenciones. Ninguno de los asesinos fue atrapado.
Hace 2 días, otro cubano, Juan Carlos Reyna Molas, hermano del asesinado en la zona hotelera, también fue emboscado y tiroteado, quedando con muerte cerebral. El poder de los sicarios es evidente.
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